Working!!!
“Así que tu soy chileno sapo culiao”, fue mi bienvenida cuando llegué a trabajar el primer día al restaurant. Jajajaja... La frase me la dijo Tony, un inglés de padres italianos y... casado con una chilena. Apenas lo escuché maté de la risa y me contó que cuando vivió un tiempo en Chile lo primero aprendió fue eso y otros garabatos como los que ustedes ya se imaginarán. Me dio todo el rosario de palabrotas que hicieron que por mas de 10 minutos me riera a carcajadas... Hasta que me dijo que era de la U y ahí cambiamos el tonito así que lo veté hasta que logré convencerlo de que el popular es lo más grande.
Ahora les contaré un poco más en detalle cómo llegué ahí, cómo lo he pasado y qué he hecho.
Resulta que un día caminando con David de repente vi en la calle un cartel de restaurant que tenía una bandera chilena acompañada de otras latinas, por lo que de inmediato me dio la curiosidad por entrar a ver de qué se trataba.
Había un par de mozos parados y les pregunté por qué tenían la bandera chilena afuera. “Tú eres chileno?”, me preguntó en un español italianizado el “camarero”, quien ante mi respuesta afirmativa me comentó que el restaurant antes tenía dueños italianos pero que ahora el “manager” era chileno, aunque ese día no iba a trabajar. “Ven el viernes, ahí es seguro que lo encuentras”...
Llegó el viernes y por supuesto que fui... Llevé algo de plata por si me tentaba a comer y también me acompañaron David y Konei, a quienes los tenía locos contándoles de la comida chilena que es harto más rica que la inglesa que se destaca por tener todo enlatado (de verdad son un espanto en la cocina acá).
La cosa es que llegué y me presentaron a Eduardo, quien salió de Chile hace 27 años a trabajar en barcos por varios países de Europa hasta que llegó acá. El tipo es muy agradable y conversamos de todo. No estaba muy informado de las noticias porque no tiene mucho tiempo, pero le comenté las cosas más importantes y se notaba que disfrutaba con lo que escuchaba...
Cuatro días más tarde me llamó por teléfono preguntándome si me interesaba trabar en el restaurant... Ahora viene lo mejor de todo.
Me tocaba trabajar viernes y sábado y aunque no iba nervioso para nada, obviamente antes de llegar pensé en cómo serían mis “compañeros”. Grande y rica fue la sorpresa cuando todos me saludaron súper bien y durante toda la jornada me ayudaron con todo. Aunque estuvieran muy ocupados (le va bien al local) me llamaban y me mostraban cómo tenía que hacer las cosas para que aprendiera rápido así que me sentí muy bien.
Además debo contarles que cuando llegamos nos dan comida a todos, puedo tomar lo que quiera y cuando se va toda la gente siempre nos quedamos conversando y comiendo, así que creo que no pude caer mejor parado ahí.
A todo la mayoría de la gente que trabaja habla español... Mi inglés no va a mejorar mucho en el “Leonis” pero la verdad es que lo paso muy bien, me río harto y eso es impagable. Tendré que estudiar más en mi tiempo libre no más para el inglés, pero eso es lo de menos.
Podría contarles varias cosas más pero no quiero hacer tan largos y lateros los posts así que si quieren saber algo más, pregunten. En todo caso creo que estoy acumulando historias y hay harto material para el blog...
Les juro que si antes de viajar me hubieran preguntado cómo sería estar acá, sobre todo en el primer mes, jamás me hubiera imaginado lo rica que ha sido hasta ahora. De verdad estoy feliz haciendo hartas cosas, aprendiendo y creciendo... Pero por supuesto extrañando a la familia y los amigos.
Un abrazo a todos!
PD: Quién detiene a la guillotina alba???!!! Ya no tiene ningún brillo esto...
Ahora les contaré un poco más en detalle cómo llegué ahí, cómo lo he pasado y qué he hecho.
Resulta que un día caminando con David de repente vi en la calle un cartel de restaurant que tenía una bandera chilena acompañada de otras latinas, por lo que de inmediato me dio la curiosidad por entrar a ver de qué se trataba.
Había un par de mozos parados y les pregunté por qué tenían la bandera chilena afuera. “Tú eres chileno?”, me preguntó en un español italianizado el “camarero”, quien ante mi respuesta afirmativa me comentó que el restaurant antes tenía dueños italianos pero que ahora el “manager” era chileno, aunque ese día no iba a trabajar. “Ven el viernes, ahí es seguro que lo encuentras”...
Llegó el viernes y por supuesto que fui... Llevé algo de plata por si me tentaba a comer y también me acompañaron David y Konei, a quienes los tenía locos contándoles de la comida chilena que es harto más rica que la inglesa que se destaca por tener todo enlatado (de verdad son un espanto en la cocina acá).
La cosa es que llegué y me presentaron a Eduardo, quien salió de Chile hace 27 años a trabajar en barcos por varios países de Europa hasta que llegó acá. El tipo es muy agradable y conversamos de todo. No estaba muy informado de las noticias porque no tiene mucho tiempo, pero le comenté las cosas más importantes y se notaba que disfrutaba con lo que escuchaba...
Cuatro días más tarde me llamó por teléfono preguntándome si me interesaba trabar en el restaurant... Ahora viene lo mejor de todo.
Me tocaba trabajar viernes y sábado y aunque no iba nervioso para nada, obviamente antes de llegar pensé en cómo serían mis “compañeros”. Grande y rica fue la sorpresa cuando todos me saludaron súper bien y durante toda la jornada me ayudaron con todo. Aunque estuvieran muy ocupados (le va bien al local) me llamaban y me mostraban cómo tenía que hacer las cosas para que aprendiera rápido así que me sentí muy bien.
Además debo contarles que cuando llegamos nos dan comida a todos, puedo tomar lo que quiera y cuando se va toda la gente siempre nos quedamos conversando y comiendo, así que creo que no pude caer mejor parado ahí.
A todo la mayoría de la gente que trabaja habla español... Mi inglés no va a mejorar mucho en el “Leonis” pero la verdad es que lo paso muy bien, me río harto y eso es impagable. Tendré que estudiar más en mi tiempo libre no más para el inglés, pero eso es lo de menos.
Podría contarles varias cosas más pero no quiero hacer tan largos y lateros los posts así que si quieren saber algo más, pregunten. En todo caso creo que estoy acumulando historias y hay harto material para el blog...
Les juro que si antes de viajar me hubieran preguntado cómo sería estar acá, sobre todo en el primer mes, jamás me hubiera imaginado lo rica que ha sido hasta ahora. De verdad estoy feliz haciendo hartas cosas, aprendiendo y creciendo... Pero por supuesto extrañando a la familia y los amigos.
Un abrazo a todos!
PD: Quién detiene a la guillotina alba???!!! Ya no tiene ningún brillo esto...
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